¿Por qué la FIA inspeccionó solo cuatro de los veinte monoplazas en el Gran Premio USA en Austin?
Se eligieron los monoplazas de Verstappen, Leclerc, Norris y Hamilton dejando el resto sin control tras el Gran Premio, abriendo una gran duda sobre la forma en que se seleccionan.

Controlados desde Ginebra
La FIA tiene la potestad y libertad de elegir de forma totalmente arbitraria los monoplazas que desea revisar. Ya con eso hay una clara protección ante posibles preguntas o cuestiones al respecto del motivo por el que sólo 4 coches de 20 pasaron bajo el examen de los comisarios.
Además hay otro dato muy importante que tener en cuenta. La sala de control que la FIA tiene en Ginebra y desde la que “en teoría” se da un apoyo directo y constante a los comisarios que están en dirección de carrera en el circuito.
Desde allí se tiene acceso a todas las imágenes de lo que sucede dentro y fuera de la pista. En especial ese “VAR” de la F1 se utiliza para los “famosos” track limits entre otros aspectos.
En el caso del Gran Premio de ayer habrían observado las oscilaciones de los monoplazas a la búsqueda del “porpoising” y su métrica exacta según el nuevo reglamento. Por lo que pudieron aconsejar a Jo Bauer y los suyos que inspeccionaran a esos monoplazas en concreto.

Lentos y sin reacción
El resto de monoplazas que entraron a parque cerrado tras la prueba no fueron examinados ni contralados por los comisarios FIA. Eso ha provocado grandes dudas sobre si algún otro coche podría incumplir el reglamento y se salvó de la sanción impuesta a Hamilton y Leclerc.
El reglamento indica que los monoplazas deben estar un tiempo máximo de media hora (30 minutos) a disposición de los comisarios para una posible inspección en esa zona de parque cerrado. Pasado ese tiempo los integrantes de cada equipo pueden retirarlos sin problema alguno.
Ese tiempo es el estipulado por el reglamento FIA para que se pueda presentar alguna protesta o pedir que se realice una inspección.
Cuando el comunicado oficial firmado por Jo Bauer llegó a los comisarios en Dirección de carrera ya había pasado ese tiempo máximo de 30 minutos. Y en consecuencia ya no había opción a realizar más controles sobre otros monoplazas.

Todos al avión
Una de las razones que se han dado de manera “extra oficial” es que no había tiempo suficiente para revisar a todos los coches. El motivo es que con la proximidad del siguiente Gran Premio en México, los equipos y la FIA tenían mucha prisa en desmontar todo y empaquetar para que los grandes contenedores partieran ya por la noche en avión rumbo a la siguiente prueba.
La logística de la F1 está medida al segundo y parece que habría sido demasiado problemático retrasar la salida Austin rumbo a México D.F. de todo el material.
Hay quién ya con mucho acierto está planteando si no son demasiadas carreras en un mismo año y con tanta cercanía. Si el calendario se hace única y exclusivamente pensando en el “negocio” de la F1 y no en otros aspectos tan importantes como los deportivos.
El hecho de que la FIA por reglamento limite en horario sus propias inspecciones técnicas para ayudar a que se desmonte rápidamente todo ya es una clara indicación. Y si encima le sumamos que en Austin había formato Sprint ya se complica todo un poco más.
Algunos equipos habrían solicitado una revisión a la FIA de los Grandes Premios con Sprint Race en cuanto a configuración; pero ninguno por el momento ha incidido en lo de aumentar el tiempo de parque cerrado para realizar las verificaciones posteriores.
La F1 sigue teniendo sus grandes incógnitas por despejar.
